El último día del primer mes de este 2014.
Momento perfecto para hacer un check list de los objetivos y deseos para este ciclo.
Al finalizar el año 2013 y comenzar el 2014 seguramente hicimos un inventario personal de lo que nutre nuestra vida y de lo que la contamina, de esas cosas, situaciones o personas con las que nos sentimos atorados. Seguro también hicimos por lo menos mentalmente una lista de lo que queremos y no queremos para este nuevo ciclo, pero, ¿A cuántos de nosotros se nos han olvidado las metas, a cuántos se nos ha perdido el mapa, y cuántos hemos dejado en el cajón del «después» nuestro entusiasmo por realizar nuestros sueños, por llevar a cabo nuestros planes o por cerrar ciclos que gritan por ser concluidos?, y en caso contrario… ¿Qué tal vamos, qué necesitamos, vamos por buen camino, nos sentimos satisfechos?
Un inventario personal a final de cada mes nos puede ayudar a direccionarnos, a seguir con un mayor y mejor sentido, nos puede ayudar a evitar esa frustración a final de año donde nuestros objetivos se repiten por no haberlos logrado. Esto produce una falta de credibilidad en nosotros mismos, rompe la auto-confianza, la autoestima desciende y no entendemos cómo no pudimos obtener éxito. Ya lo decía Einstein: «No podemos pretender resultados distintos haciendo lo mismo». Si realizamos las mismas cosas, de la misma manera, sólo obtendremos más de lo mismo, y en ese montón de «lo mismo de siempre» hay cosas que ya no queremos, entonces… ¿Por qué no nos aplicamos y decidimos hoy hacer nuestro inventario personal de enero?
Puede suceder:
*Que nos frustremos un poco, que nos venga la tristeza o decepción por la inactividad hacia el cumplimiento de nuestros propósitos y nos quedemos ahí, resignados a que «este año tampoco será y se nos va otro más de nuestra vida». (Recuerda asumir las consecuencias)
*Que nos frustremos un poco, que nos venga la tristeza o decepción por la inactividad hacia el cumplimiento de nuestros propósitos o que hagamos conciencia tranquilamente sin castigarnos, y entonces, el entusiasmo renazca, nos levantemos y vayamos con ímpetu a la realización de nuestros propósitos.
*Que quizá nuestro plan deba tener ciertas modificaciones y saquemos las herramientas para lograrlo.
*Que reconozcamos que necesitamos ayuda y apoyo, y vayamos en busca de él antes de que lo acumulable nos ahogue. (Coaching, terapia, Familia, amigos, institución, etc.)
*Que nos cantemos un «urra urra» por lo bien que vamos y sigamos.
*Que nos pongamos metas más altas para Febrero por que descubrimos que nuestro éxito en enero rebasó las expectativas y queremos más.
Mucho que ganar, nada que perder con un inventario personal a Final del mes.
Deseo con el alma que hayas tenido un muy buen primer mes del año y que el siguiente sea mejor. Confío en que así será, podrías confiar también tú.
¡Feliz inventario personal!
Kenny Pineda.
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